Orígenes y Curiosidades del Gato

Hace unos 50 millones de años vivió Miacis, antecesor común de perros, félidos y úrsidos (osos), del tamaño de una comadreja.

10 millones de años después aparece ‘Dinictis’, del tamaño de un lince, antecesor de todas las especies de félidos de distribución mundial a excepción de la Antártida.

El Gato y el Hombre

El gato es una especie muy cómoda a la hora de convivir con nosotros, por su limpieza, el espacio que ocupa y su ‘espacio individualizador’, o sea, su intimidad que lleva a muchos a afirmar que, de hecho, es una especie semidoméstica.

El gato empezó a convivir con nosotros después de los perros y el ganado; los restos prehistóricos encontrados junto al hombre posiblemente sean fruto de la caza más que de la convivencia.

La primera representación conocida se da en Egipto hace 3800 años. Los egipcios utilizaban la onomatopeya “Mau” para designar al gato.

En el 1800 a. C., comienza a tener un papel en rituales religiosos para la cultura egipcia, como símbolo de fecundidad y reencarnación de divinidades. Los gatos machos se consagraban al dios del Sol, Ra y las hembras se valoraban como la encarnación de la diosa de la fertilidad.

El gato egipcio ‘Kaffir’, Felis lybica, es el antepasado del gato doméstico.

Después de la muerte, se embalsamaban y eran envueltos en lienzos para ser momificados y enterrados en enormes cementerios. Algunos de estos camposantos llegaron a albergar los restos de millones de gatos.

Los romanos llevaron el gato a Europa durante el primer siglo de la era cristiana, donde mantuvo una buena relación con el hombre hasta la Edad Media, aunque hubo altibajos debido a la asociación con la brujería.

El gato recuperó su aceptación popular cuando la peste negra (peste bubónica) invadió a Europa y sus características depredadoras fueron reconocidas como fundamentales para el control de roedores. Desde ese momento, el gato ha continuado ganando popularidad como amigo y animal de compañía.

Desde el ‘tigre dientes de sable’ de hace 15 mil años al gato doméstico, todos los felinos se asemejan en su cuerpo ágil, patas ingrávidas, cabeza redondeada, exquisitas proporciones, lo que nos recuerda su evolución a partir de un antecesor común.

Se reconocen 58 especies de felinos, que genéticamente tienen 38 cromosomas, a excepción del género Leopardus que tienen 36.

La diferenciación más importante es en el hueso hioideo.

Género Panthera: león, leopardo, tigre, jaguar. El hioideo parcialmente cartilaginoso; pueden rugir.

Género Felis: El hioideo es óseo; emiten maullidos o gritos.

Género Acinonyx: guepardo; con garras no retráctiles.

La pantera nebulosa tiene los dientes caninos muy largos… Neofelis.

Linces con cola corta y orejas puntiagudas… Lynx.

Género Leopardus: con 36 cromosomas, incluyendo el ocelote y el gato de Geoffroy.

Comportamiento Social y Aprendizaje

En general, se les considera retraídos, insociables e inflexibles, aunque en realidad son mucho más adaptables de lo que se les supone.

En el gato silvestre tienden a mantener la distancia entre sí, no obstante, su aislamiento no llega a ser total. De igual modo, el gato casero ha sido visto como un animal antisocial, pero sin embargo, tienen una serie de conductas sociales como el acicalamiento mutuo, dormir juntos y el saludo después de una ausencia prolongada.

Muchas colonias de gatos existen pacíficamente hasta que se incorpora un nuevo gato y tal vez, alguna limitación espacial

arbitraria para cada uno de los territorios individuales es superado y esto provoca estragos en la convivencia.

Por mucho que el gato pueda ser tratable, los seres humanos encuentran casi imposible dominarlo por completo, sin menos cabe del fuerte vínculo que comparten propietarios y felinos.

Sus Sentidos e Instintos

Vista: El gato es un animal predominantemente nocturno, siendo en la noche cuando desarrolla su mayor actividad de caza, cortejo, etc.

Podemos decir que el ojo del gato es un diafragma perfecto.

Hasta la fecha, que se sepa, es el único animal que posee células auditivas en el ojo, lo cual le da una mayor capacidad de percepción y de memoria y recuerdo.

Olfato: De gran importancia en la valoración y preferencias alimentarias. Un gato con rinitis puede perder el apetito.

Oído: Detecta entre 30 y 45,000 Hertz.

Este espectro auditivo tan amplio le permite detectar cualquier situación. Tiene un perfecto sentido del equilibrio. Caída siempre de pie, rectificación del salto.

Gusto: Tiene preferencia por los sabores fuertes y finos.

Tacto: Tiene una gran sensibilidad cutánea en las almohadillas plantares incluso en la carrera y sus bigotes tienen órganos sensibles que influyen en su equilibrio.

Nutrición Felina

Claramente existe una relación entre nutrición, enfermedad e inmunidad. La cardiomiopatía dilatada felina es la consecuencia de la ingesta inadecuada de taurina, por poner un ejemplo.

Los gatos son carnívoros estrictos. Sin embargo, esto no implica que una dieta carnívora estricta suministre una nutrición balanceada y completa al gato. Veamos pues al gato silvestre, el cual consume los músculos, contenidos intestinales y huesos de su presa. Cuando un gato se mantiene con una dieta solo a base de carne y balanceada para perros, se producirán alteraciones.

Sus requerimientos proteicos son mucho más altos que en otros mamíferos como el perro.

Es muy sensible a las deficiencias del aminoácido arginina y depende por completo de las fuentes dietéticas para satisfacer las demandas metabólicas.

Puesto que los alimentos comerciales están formulados con niveles adecuados de arginina, la deficiencia se encuentra en gatos alimentados con dietas caseras o anoréxicos.

También dependen del aminoácido azufrado taurina en la dieta, son incapaces de convertir el β-caroteno en vitamina A, liposoluble y están obligados a consumir la vitamina A, preformada en la dieta.

La sensibilidad al déficit de tiamina, una vitamina B hidrosoluble, puede tener efectos acusados a nivel cardiovascular, gastrointestinal y nervioso central, de manera mucho más acusada que en el perro.

Los gatos requieren ácido araquidónico en la dieta. Este ácido graso está presente en los tejidos de los animales de los que se alimenta.

Resumen

El felino más pequeño es una obra maestra. Leonardo da Vinci.